El pensamiento filosófico judío en la época helenística surgió de la confrontación entre la religión hebrea y la filosofía griega y se vio influido por las ideas platónicas y estoicas. Sus exponentes buscaban demostrar la espiritualidad de la concepción judía de la divinidad, así como la racionalidad de sus leyes rituales. A la vez polemizaban contra el politeísmo y las prácticas paganas de otros cultos.

La producción literaria de estos pensadores desapareció casi en su totalidad De hecho, en la actualidad sólo se conocen los escritos de Philo Judaeus de Alejandría (20 a.e.c.-50 e.c.) cuya figura ocupa un importante lugar dentro del movimiento filosófico judío. Su obra relata la lucha recurrente del pueblo judío por vivir de acuerdo a sus leyes y preservar sus valores. Su pensamiento se basa en la afirmación de que la Torá o Biblia, como palabra divina, contiene un significado aparente dirigido a las masas y uno oculto que los filósofos podían descubrir utilizando métodos de interpretación alegóricos.

Philo se enfrentó al Imperio romano, a una civilización en constante desarrollo, en la que, ciencia, filosofía, arte, drama y religión se ceñían a los criterios de la tradición griega. A pesar de su profunda lealtad al “pueblo del libro” no dejó de   leer los clásicos griegos, introyectando sus enseñanzas

HISTORIA
No existe mucha información sobre la vida de Philo. Se cree que nace en Alejandría, centro cultural y filosófico del Imperio romano y cuna de una de las más importantes comunidades judías de la diáspora. La ciudad es fundada en el siglo III a.e.c. por Alejandro Magno quien reúne a griegos, judíos y macedonios en su territorio. Aquí se crea la más grande biblioteca de la antigüedad y es aquí donde el platonismo se convierte en neoplatonismo. Los judíos que habitan Alejandría se ven influidos por esta corriente creativa.

Philo pertenece a una de las más nobles familias judías de Alejandría y se educa en un hogar fiel a la fe y tradición hebreas. Sus trabajos escritos en griego, muestran una gran erudición en literatura y filosofía clásicas y un amplio conocimiento de ciencias generales y retórica. A la vez que reflejan su preocupación por las cuestiones filosóficas y religiosas así como su deseo de vivir en un estado de meditación mística aislado de los demás, son vivo testimonio de su interés por fungir como miembro activo de su sociedad, como hombre práctico y observador crítico de su tiempo.

SU FILOSOFÍA
El pensamiento de Philo tiene una estructura en la que se pueden distinguir diversos elementos platónicos, como lo es la separación del mundo en dos reinos: material y espiritual o inteligible. Es en éste último en el que se puede alcanzar la verdad absoluta, porque el mundo material está caracterizado por el relativismo.

Su esquema filosófico se centra en:

–Dios. Philo alterna entre la visión griega de la  divinidad y la judía y nunca trata de sistematizarlas. Dios es el “Dios único ” de la Torá, que mantiene una relación especial con el pueblo judío. No es el “Dios tribal” del Libro de Jueces o la figura mitológica que puede hablar con Adán. Ahora es el principio que contiene al mundo, pero el mundo no lo contiene a El. Todos los objetos y cualidades emergen de El. Es por su tradición judía que Philo busca a un Creador que esté en relación con el hombre y con el Universo, un Dios de justicia y piedad, de ley y perdón. Los judíos, de acuerdo a la Biblia, tuvieron una revelación única de la naturaleza y las leyes divinas. Los paganos creían que los códigos legales, como la Torá, eran inferiores a la verdadera ley del Universo. Pero de acuerdo al esquema de Philo, los judíos que seguían literalmente sus mandamientos tenían una guía ética formulada por Dios, superior a la de otros pueblos. Para los poseedores de una sensibilidad espiritual, el valor de este código legal radica en el hecho de que a través de las alegorías, el hombre puede llegar a la ley divina, porque la Torá constituye el camino a la luz de Dios.

– El Hombre. Para Philo el hombre está compuesto de cuerpo y alma, que lo relaciona con Dios. El ser humano tiene que elegir uno de estos dos caminos en su vida. Este dilema es identificado por Philo como la lucha del tzadik u hombre piadoso que quiere controlar sus pasiones a través de la razón. Detrás de esta visión aparece la narración del pecado humano en el Jardín del Edén, interpretada alegóricamente como el drama del desliz del hombre. La más violenta de las pasiones, el deseo es representada como la serpiente que no se dirige a la razón (Adán) sino a los sentidos (Eva).

SUS ESCRITOS
La parte más relevante de la obra filosófica y ética de Philo es un estudio sobre el Pentateuco que se divide en tres tratados:

1.- Sobre la Creación del Mundo. En este tratado explica que la Biblia, a pesar de ser un código legal, se inicia con el relato de la creación para demostrar que las leyes del Pentateuco se encuentran en armonía con las de la naturaleza. Consciente de que sus lectores desconocen la tradición bíblica, relata cada incidente histórico en forma detallada. Esta serie la dirige a los “amigos gentiles” con el objeto de enaltecer el valor supremo de la Tora como expresión de la voluntad divina. Es éste un documento complejo en el que Philo transforma las historias bíblicas en tratados sobre la teoría de Platón y Pitágoras quien establece que la estructura del Universo se compone de relaciones matemáticas.

Philo reinterpreta las biografías de los grandes patriarcas hebreos -Abraham, Isaac, Jacob, Joseph- y glorifica la figura de Moisés como el más grande de los héroes que vivió bajo la ley aún antes de que se crearan las leyes divinas. Ignora las historias y los héroes mitológicos griegos y opta por los patriarcas bíblicos como la representación de las leyes a las que todos los hombres aspiran . Más adelante procede a analizar en detalle la legislación hebrea y finaliza con lo que considera el problema general de la recompensa y el castigo.

2. Interpretación Alegórica del Pentateuco. Esta serie se compone de 18 tratados que estudian el libro de “Génesis” en forma alegórica a través de un conjunto de conceptos filosóficos abstractos. Se dirige a un grupo de judíos con mayores conocimientos bíblicos y escribe con la certeza de que sus lectores, quienes conocen su pensamiento, disfrutarán de estas meditaciones.
3. Preguntas y Respuestas sobre el Exodo. Sólo se conoce la traducción al arameo de este documento. En el Philo se dirige al judío que se aboca al estudio de la ley y al que está interesado en el espíritu. Está escrito en forma de comentario helenístico, en el que cada párrafo comienza con una pregunta que recibe dos respuestas: una literal y una alegórica. Este material era utilizado en la elaboración de sermones para la población.

BIBLIOGRAFÍA

Noveck, Simon
Creators of the Jewish Experience
B’nai B’rith Books, USA, 1985

Encyclopaedia Judaica
Keter Publishing House, Ltd., Israel, 1981