Mayo 29, 2025
Hoy es uno de esos días que uno guarda en el corazón para siempre. Ver a mi nieto Joshua presentar este libro es más que un orgullo, es una bendición. No solo por el trabajo que ha hecho, que es admirable, sino por el esfuerzo y el alma que sé, que ha puesto en cada página.
Joshu, tú no conociste a tu tatarabuelo, el Rabino Jacobo Goldberg, nuestro querido zeide, y aún así, pareces su alma gemela. Yo estoy seguro que hoy, él estaría aquí, en primera fila, con los ojos llenos de lágrimas al igual que yo, y viendo florecer el legado que tú hoy haces crecer con tanto amor.
Este libro no solo es un homenaje a nuestras raíces, es también un espejo del hombre en el que te has convertido.
Un hombre que honra la memoria, que estudia con pasión, y que camina con un propósito hacia su propia misión en la vida.
Ser Rabino no es solo un título, es un compromiso con la historia, con la comunidad y con Dios. Y tú, Joshua, has abrazado ese compromiso con una fuerza que nos inspira a todos, pero principalmente a mí, que soy uno de tus más grandes admiradores.
Te quiero, y estoy orgulloso de ti hasta lo más profundo de mi corazón y le doy gracias a Dios por habernos permitido a tu bobe y a mí, vivir este momento. Mazal Tov.
Leben Zols Tu! Que vivas siempre con este amor por nuestras raíces y que Dios siga iluminando tu camino como hasta hoy!
¡FELICIDADES JOSHU!